domingo, 3 de octubre de 2010


Te olvidé...
como las golondrinas olvidan el invierno
como el árbol a las hojas secas
como un polluelo a su cascarón...
así te olvidé...
Sin pensarlo,
día tras día, cada vez
menos llorando...
así te olvidé...

Y no faltará ocasión
en que quizás de a poco,
noche tras noche,
vuelva, sin duda, a recordarte...